lunes, 8 de abril de 2013
Miradas
Sabía que lo ibas a volver a hacer. Lo sabía. Y lo hiciste. Pero no deja de doler. No duele menos. No lloro menos. No sufro menos. Me siento furiosa, dolida, humillada. Te di todo lo que tenía, lo exprimiste y tiraste. Jamás lo valoraste. Jamás dijiste un "te quiero" sincero. Jamás sentiste lo que yo. Me utilizaste una, y otra, y otra vez. Sin escrúpulos, sin compasión, todo bajo dos palabras: te quiero. Una frecuente mentira, una rara verdad. Dos palabras sobre las que me construí. Dos palabras vacías. Palabras hechas de letras, no de sentimientos. Promesas escritas sobre papel mojado. Besos con dulce sabor a veneno. Miradas con mentiras escritas en los ojos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario