lunes, 29 de septiembre de 2014

Cuando la oscuridad
llame a tu puerta
acuérdate siempre
de lo que te hizo luchar
en cada una de tus guerras.
Recuerda el color de tus ojos,
recuerda el olor de tu risa, 
recuerda los gestos
de todas las personas
a las que has entregado
tu vida.
Cuando quieras acabar,
termina
con
el dolor de unas paredes
sin cuadros
de unos botones
sin camisas
y de unas pisadas
sin zapatos.
Estás vivo,
y me tienes a tu lado.
Cuando decidas
que ya nada vale la pena
sonríe un poco
que ya no tienes nada
que perder
escuece un rato
derrama lágrimas si lo necesitas
y pide un abrazo.
Cuando decidas
que ha llegado la hora
de que el dolor termine 
su pacto,
punto y final,
espacio en blanco,
lánzate por el otro lado,
date la vuelta,
mira 
cada una
de las nubes
del cielo
mima
cada uno
de los momentos
de decir "te quiero".
Cuando quieras desaparecer,
olvídate de esa idea,
y espera a tu amanecer.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Estoy harta de fingir
ser de hielo.
Estoy más derrotada
que nunca
en batalla de nadie;
ya no sé ni quién soy
de dónde vengo
ni dónde voy.
Donde las dan las toman
y yo solo quiero que me den
amor
que me quieran
y creérmelo
y querer
y estar bien.
No quiero seguir levantando
ladrillo
tras ladrillo
en un intento de hacerme creer
que soy infranqueable
y que nada es de verdad.
No quiero hacerme creer
que soy un barco
de cartón
hundido en el fondo
del mar
jurándome que allí 
sé respirar.
Ni el hare krishna salva
ni Dios te regala el perdón
por el que rezas 
de rodillas
cuando ya no encuentras
ni un adiós.
Lo único que existe
y la única solución
es el amor.

jueves, 18 de septiembre de 2014

No sabes todo lo que quise
decirte
y todo lo que me callé.
Te eché de menos, 
te echo
y te echaré.
Como siempre, soy de 
repetir-
me
todos los días. 
Y no quiero volver
a sufrir otra vez.
Me lleno de heridas 
mientras tú
te sacudes el polvo
de las palmas 
de las manos
y me miras con suficiencia
y te ríes hacia fuera
y me escupes en
la cara
y me recuerdas
cada
corte.
Y no sé cómo estás
por dentro
ya sabes que yo siempre 
me creo lo que
me da miedo
y nunca confío
cuando me dicen 
"te quiero".
Y yo siempre que lo digo 
lo convierto en mi rezo.
No sabes todo lo que quiero
decirte
y todo lo que jamás diré.
Algunas heridas
no tienen precio
y algunas noches
recordaré lo que era
tener un sitio donde
reposar
en silencio.
Seguiré respondiendo silencio
hasta que silencio sea lo que quede
y nada
me saque del sueño 
de los domingos.
Pero hoy,
hoy no me acuerdo.

viernes, 12 de septiembre de 2014

¿Cuándo termina
una rueda interminable?
Doy gracias 
sin escucharme; 
y de nada
y de todo
sin siquiera
girarme.
Hicimos de sobra,
matamos al diablo
y bajamos 
a Dios.
¿Qué hemos sido?
Nos creímos los dueños
de todo
y al final fuimos
engullidos
por nuestro propio
lodo.
¿Has visto al demonio?
Ya lo perdimos.
¿Me has visto a mí?
Si me encuentras 
devuélveme,
necesito un buzón 
donde lanzar
todas mis cartas.
No paro de recibir
postales de
tus párpados atravesando
los míos
en un filo traicionero.
Y no me gusta imaginarte
y que me falle la memoria
llenándote de defectos.
Soy débil,
pero contigo nunca lo fui.
O eso creo.
Me echo de menos,
pero te necesito más.
Escríbeme si me lees
hasta atragantarte 
de mentiras.
Y sólo cuando te ahogues,
sólo entonces,
respira.

martes, 9 de septiembre de 2014

Y ante
      todo
siempre
bajo,
cabe, con
en      contra
de
    ti
desde nunca 
para
por
    qué
sin, sobre
todos

         tú.